“Las personas con síndrome de Down podemos hacer deporte y todo lo que queramos. Lo importante es querer”
Guillermo Gracia es un joven deportista de 18 años que tiene síndrome de Down y un afán de superación sin igual. Entrena y compite en inclusión junto a nadadores sin discapacidad en su Club Cáceres Delfines, donde se siente “como uno más”. Además, tiene un palmarés como nadador repleto de premios nacionales e internacionales, además de varios récords del mundo en diferentes estilos de natación dentro de la categoría adaptada para personas con discapacidad intelectual.
“Las personas con síndrome de Down podemos hacer deporte y todo lo que queramos. Me gusta mucho entrenar con mi club. Mis compañeros son muy buenos y me lo paso muy bien. Mis entrenadores son muy divertidos, aunque cuando se enfadan…”, explica Guillermo en una entrevista a DOWN ESPAÑA, en la que también participan sus padres y entrenadores.
“El deporte es muy bueno. Me hace estar fuerte, sano y guapo”, nos cuenta este joven cuya forma física es espectacular.
Este joven cacereño comenzó a nadar como actividad de Atención Temprana en su asociación DOWN CÁCERES cuando era un bebé, y con el paso de los años, nunca ha querido dejar de mejorar su estilo como nadador. Actualmente, cuenta con 19 récords de España y 4 del mundo en diferentes pruebas y estilos de natación en categoría adaptada. Además, ha sido campeón de Europa y del Mundo en varios campeonatos, el último en diciembre de 2021 en Francia, junto a la Federación Española para Personas con Discapacidad Intelectual (FEDDI).
“Disfruto entrenando y compitiendo. Lo que más me gusta es nadar a crol y mariposa, y lo que menos, la braza. Me gusta hacer ejercicio y tener más músculos”, afirma Guillermo, quien también confiesa que entrenar “ a veces es muy cansado” y que hay día en los que no le apetece. “Cuando no me salen las cosas tengo que repetirlas y hay veces que no soy capaz, pero lo intento”, señala.
Su gran capacidad de superación y sacrificio son las claves para que Guillermo sea todo un deportista de élite que lucha por alcanzar sus objetivos. Además, tras finalizar los estudios en un colegio también inclusivo, Guillermo compagina sus entrenamientos estudiando Grado Medio en Guía en Medio Natural y de Tiempo Libre. “Me gustaría ser entrenador de natación y poder enseñar todo lo que sé”, señala el joven.
Actualmente, este disciplinado deportista y forofo del Real Madrid, se entrena junto a su club para disputar la Liga Diputación junto a nadadores sin discapacidad y bajo la Federación Extremeña de Natación, en la que si consigue la marca mínima podrá ir al Campeonato de Extremadura de invierno, su gran objetivo. Por otro lado, en modalidad adaptada, prepara el Campeonato de España FEDDI y el Mundial Virtus en Francia en junio de 2023, “donde espero hacerlo muy bien y ya estoy entrenando mucho”, indica Guillermo.
“De lo que estoy más orgulloso es del título de campeón del mundo en Australia, y del premio de mi invitación al palco del Real Madrid a ver un partido. Florentino Pérez me regaló una camiseta”, cuenta Guillermo.
Además de sus premios en competiciones deportivas, Guillermo obtuvo la mención honorífica del Consejo Superior de Deportes y la pasada semana recibió el Premio Espiga de la Junta de Extremadura por su trayectoria deportiva.
Deporte inclusivo
Para los padres de Guillermo, Lorena y Jorge, siempre ha sido muy importante que su hijo hiciese aquello con lo que disfrutase en inclusión. “El deporte inclusivo es fundamental para un deportista con síndrome de Down. Hay que normalizar su vida y la inclusión les aporta necesidad de superación. Esta inclusión también es fundamental para el resto de chicos porque aprenden a normalizar lo diferente, y que cada uno con sus diferentes capacidades puede alcanzar las metas”, explican.
Además, los padres de Guillermo aseguran que a su hijo el deporte le ha aportado “autonomía, capacidad de trabajo en equipo, relaciones sociales, poder pertenecer a un grupo y sobre todo reconocimiento social. Los entrenamientos y las competiciones también le aportan disciplina y capacidad de organización, sin olvidar la salud y el desarrollo físico”.
Por su parte, Guillermo, que ha cambiado de club hace tan solo unos meses, destaca que además de tener compañeros y entrenadores “muy majos”, le incluyen en el equipo y le ayudan cuando es necesario. “Me esperan, me ayudan y me fijo en ellos cuando algo no me sale. Me río mucho y son muy divertidos”, explica.
“Este año he empezado con ellos y son una pasada. Con los entrenadores hablo de muchas cosas, de música, de fútbol… Aunque no son del Real Madrid, una pena…. Son muy exigentes, pero lo llevo bien”.
Sergio Mogena y Carlos Corcho son el entrenador y el director técnico del Club Natación Caceres Los Delfines, y ambos coinciden en que entrenar a Guillermo está siendo “una experiencia gratificante, ya que se ha adaptado de una manera inigualable”.
“Es una persona 10, facilita todo mucho y en el grupo ha caído como anillo al dedo. Todos los deportistas lo quieren dentro del equipo y además nos ayuda mucho, porque Guille se sacrifica en todos los entrenamientos al máximo, y eso hace que los que ya llevan un tiempo en el club (y vaguean en algún entrenamiento) se aprieten algo más. Es uno más del equipo”, señalan.
Por otro lado, estos dos técnicos deportivos quieren destacar la importancia de impulsar el deporte inclusivo desde todos los clubes. “Hay que apostar por la inclusión en el deporte. Enseñemos a nuestros deportistas a entender que son uno más, y que todos forman parte de su “familia deportiva”.
Un joven “risueño y comprometido”
Guillermo disfruta, igual que la mayoría de jóvenes de su edad, saliendo con sus amigos, jugando a la Play Station, pasando tiempo en familia y practicando deporte. “Le apasiona estar con sus dos hermanos y practicar los deportes en general. Le encanta la música y bailar”, dice su madre. Además, da charlas en centros educativos sobre la importancia de la educación inclusiva en la que niños y niñas con y sin discapacidad aprenden juntos.
“Las personas con síndrome de Down pueden hacer todo lo que quieran. Lo importante es querer hacerlo”, recalca Guillermo, quien señala el papel tan importante que juega su familia, especialmente sus hermanos con quienes hace un “equipo completo”: “Mi familia me apoya y me acompaña siempre, como dice mi padre: nuestro lema es “siempre juntos””
Antes de finalizar la entrevista, los padres de Guillermo quieren enviar un mensaje a los padres y futuros padres de personas con síndrome de Down. “Nosotros supimos que teníamos un hijo con síndrome de Down en el momento de su nacimiento, y recibimos la notica fatal. Sin embargo, en seguida nos dejamos asesorar por familiares y profesionales y fuimos viendo que no era tan difícil cómo pensábamos. Nos gustaría decir a las familias que no les pongan límites a sus hijos, que no les crean incapaces de algo, que les apoyen en todas sus decisiones y que les exijan. Que cuando haga falta les apoyen pero que nunca, nunca hablen por ellos, que dejen que se expresen cómo y cuándo quieran y que les defiendan cuando haga falta (pero sin pasarse). Y sobre todo, que disfruten de lo que tienen, de cada paso y de cada logro”.
“Nos sentimos muy orgullosos del trabajo que realiza. Nos encanta que se puedan conocer y reconocer todos estos méritos, y que lucha por ellos como un deportista más, no como un deportista con discapacidad».